La Madre Divina, por Sri Swami Sivananda

Los niños tienen más confianza con la madre que con el padre. La madre es una encarnación de afecto, ternura y amor. Ella cuida de las necesidades de sus hijos. Siempre que el niño quiere algo, se aproxima a la madre más que al padre. En temas espirituales, el aspirante también tiene más interés en la Madre Kali que en el Padre Shiva. Shiva es indiferente al mundo externo. Él está desapegado. Está perdido en Samadhi con Sus ojos cerrados. Es sólo Shakti, la Madre Divina, quien realmente cuida de los asuntos del mundo. Ella le presentará a Su Señor para el logro de la liberación final cuando esté complacida con el empeño del devoto.

 

 

Shiva y Shakti son inseparables. Esto se muestra en Ardhanarishvara – Shiva y Parvati con un cuerpo, mitad hombre y mitad mujer. El Señor Shiva tiene a Parvati como la mitad izquierda de Su cuerpo.

 

Shiva-Jñana (el conocimiento de Shiva) nos lleva a la realización del Ser, nos confiere felicidad eterna y nos libera de nacimientos y muertes. Nos muestra la luz de la vida. Es el ojo de la intuición. Es el tercer ojo de Shiva. Este tercer ojo destruye toda ilusión y pasión.

 

 

Se piensa en Shakti (la Madre Divina) de diferentes formas. Como Sarasvati, es la Diosa del conocimiento. Como Lakshmi, es la Diosa de la riqueza. Como Parvati o Uma, es la Diosa que confiere felicidad.

 

 

El Markandeya Purana contiene setecientos versos que son conocidos como el Sapta-sati, Chandi o Devi-Mahatmya. Es uno de los más famosos textos religiosos de los hindúes. Se sitúa casi como la Gita. El mismo describe en forma alegórica que en el sendero de la salvación, los principales obstáculos son el deseo, la ira, la codicia y la ignorancia, y que podemos superarlos mediante la gracia de la Madre Divina si La adoramos con sinceridad.

 

El libro da una hermosa descripción de los tres aspectos de la Madre como Mahakali, Mahalakshmi y Mahasarasvati – los aspectos tamásico, rajásico y sáttvico de la Madre Divina.

 

Los Devas eran oprimidos por los Asuras. Entonces, los dioses invocaron las bendiciones de la Madre Divina. Ella apareció en las tres formas mencionadas, destruyó a los Asuras y protegió a los dioses. La Madre Divina ha dado, tanto a hombres como a dioses, Su promesa segura e infalible de que siempre que ellos La recuerden en momentos de peligro o dificultades, Ella los salvará.

 


¡Oh Señor Shiva! ¡Silenciosa adoración a Ti! Tú eres el único refugio, el único objeto de adoración, el único Soberano del universo, el Ser auto-resplandeciente. Tú eres el creador, conservador y destructor del universo. Tú eres el Ser Supremo, Inmóvil y Absoluto.

 

 

Shakti es la energía o el poder vital que hace posible toda actividad. Cuando un hombre hace un trabajo, lo hace sólo en virtud de su Shakti. Si es incapaz de llevarlo a cabo, dice que él no tiene Shakti para hacerlo. De allí que Shakti sea aquello que hace posible que uno trabaje. Shakti es Devi. Shakti es la Madre Divina. La mente es Shakti. Prana es Shakti. La voluntad es Shakti.

 

 

El Devi Bhagavata trata de las formas de Prakriti. Devi llevó a la Trimurti a Su morada en Manidvipa, les dio sus consortes Sarasvati, Lakshmi y Parvati, y los envió para establecer la vida del universo en el nuevo Kalpa.

 

 

El Señor Narayana creó a Brahma desde Su ombligo. Brahma no sabía qué tenía que hacer. Vishnu y Shiva tampoco sabían cómo establecer la vida de un nuevo universo en un nuevo Kalpa después de la disolución. Entonces, fueron llevados en un Vimana o carro celestial y pronto llegaron a una región extraña donde fueron transformados en mujeres. Estaban en una tierra de mujeres liderada por Devi. Era Manidvipa en el Sudha Samudra, el océano de néctar. Los recientemente convertidos en mujeres permanecieron allí durante cien años. No sabían quiénes eran, por qué estaban allí y qué debían hacer.

 

Entonces, fueron puestos en compañía de hombres y se convirtieron en hombres. Formaron parejas, Brahma con Sarasvati, Vishnu con Lakshmi y Shiva con Parvati. Se encontraron de repente en su lugar original y supieron qué hacer. Entendieron sus funciones. Las tres Murtis (deidades) obtuvieron Shakti mediante la asociación con la Devi.

 

 

Parvati es la Shakti del Señor Shiva que confiere Jñana y Mukti a los hombres. Lakshmi es la Shakti de Vishnu que da prosperidad a la gente. Sarasvati es la Shakti de Brahma que crea el mundo. Radha es la Shakti del Señor Krishna que conduce a la humanidad hacia Mukti mediante Bhakti.

 

¡Que Shakti los bendiga a todos con Shakti!